SELECCIÓN

Al calor del fuego

Quizás sólo en esta compañía pueda uno volver la vista atrás y hablar de aquello que no puede ser silenciado sin riesgo de que, de tanto callar, hablen las piedras

La autoridad y sus falacias

El sustantivo 'auctoritas' proviene del verbo 'augere', que significa «aumentar», y eso es lo que la vida buena nos pide, que dejemos este lugar con un 'stock' superior de bien al que encontramos

Sin agallas

Como el mundo no es un parque de atracciones, y está lleno de miserables sumamente peligrosos, la valentía sigue siendo la madre de todas las virtudes

Emoción y sentimiento

Nuestros sentimientos, como nuestros pensamientos, son en su mayor parte conscientes y voluntarios. Las emociones son hechos, y nuestra voluntad apenas interviene en ellas

Ensaladilla rusa

No terminaré de creerme que estamos en 1939. Putin no es Hitler, pero tampoco Stalin. A pesar de lo que digan la doctrina de la escuela liberal turolense y el pretérito diario conservador

Ucrania para adultos

El aislamiento de Rusia y su inclusión a patadas en la órbita de China son avances hacia la degradación del dólar como moneda de referencia (con el colateral golpe de gracia al euro) a favor del yuan y, finalmente, la transformación del dinero fiat en digital

Amor libre

Sólo pueden 'decidir' atarse las personas íntegramente libres, que ejercen su libertad positiva para completarse. Si el amor es paradójico es porque conjuga plenitud individual y rendición, un acto de afirmación personal junto a otro de entrega

Honrar la propia pasión

Amamos aquello a lo que nos entregamos, antes que viceversa, y apasionarse con lo que por hache o por be se hace es mucho mejor proyecto que lo de autorrealizarse

Debellare superbos

A estas alturas hemos de tener claro que no somos muchos como tampoco somos buenos. Pero cada día que pasa se hace más evidente que somos más y mejores

Elogio de la irrelevancia

El culto a la influencia mediática no es más que la última etapa del individualismo expresivo. La cosa empezó en el Romanticismo, y en la Posmodernidad la avidez y la desmesura campan a sus anchas

Textos sin espíritu

Nunca me ha gustado que me llamen constitucionalista, y por eso hoy no celebro nada más allá del santo de mi primo, que se llama Nicolás. Por católico y por español no puedo aplaudir esta constitución